Según decisión del Noveno Senado del 11 de abril de 2006 (9 AZR 610/05), la jurisprudencia establecida del Tribunal Federal del Trabajo sobre el control general del contenido de las cláusulas de reembolso, publicada antes de que entraran en vigor los artículos 305 y siguientes del BGB en vigor, según la cual el trabajador debe asumir los costes y debe participar en una formación financiada por el empresario si abandona la relación laboral antes de que hayan transcurrido determinados plazos. En casos excepcionales, dichas obligaciones de pago pueden resultar ineficaces debido a un deterioro excesivo de la libertad de elección de carrera del empleado relacionada con el trabajo (Art. 12 Párr. 1 Frase 1 GG). Una cláusula de reembolso en el contrato de trabajo tipo, según la cual un trabajador debe en cualquier caso (proporcionadamente) reembolsar los costes de formación soportados por el empleador si la relación laboral finaliza antes de un determinado período de tiempo, es demasiado amplia en términos de los hechos que desencadenan la obligación de reembolso. Generaría una obligación de reembolso incluso si el motivo de la terminación de la relación laboral entra exclusivamente dentro de la esfera de responsabilidad o riesgo del empleador. Tal cláusula no tiene en cuenta los intereses mutuamente reconocidos de ambas partes contratantes, sino únicamente los del empleador. Perjudica injustamente al empleado en contra de las exigencias de la buena fe (artículo 307, apartado 1, frase 1 del BGB). No hay razón para limitar una cláusula de reembolso demasiado amplia a los casos en los que el motivo del despido cae dentro de la esfera de responsabilidad o riesgo del trabajador mediante una reducción válida o una interpretación complementaria del contrato. Esto eliminaría por completo el riesgo que corre el empresario de sufrir una cláusula inadmisiblemente demasiado amplia y que representaría una ayuda contractual únicamente para su beneficio.